El viernes fue un dia practicamente de vaciones. Sin actos de la semana negra convocados todavia, era un dia para conocer la ciudad y empezar a recibir a los nuevos llegados.
Un ratín despues de escribir el post de ayer, me fui a dar una vuelta por Gijón y me llegué hasta la plaza del ayuntamiento, que habia quedado allí con Natalia y Gorin. Como me sobraba el tiempo, me subí hasta Cimadevilla, una enorme loma que domina todo Gijón, y desde la que se puede contemplar no sólo la ciudad sino el mar y los alcantilados. Un espectaculo portensoso. En lo alto de todo, hay una curiosa escultura de Chillida, "Elogio del horizonte", tambien conocida como "el retrete de King Kong". Es una estructura circular que el viento corta continuamente con lo que los dias ventosos es una experiencia muy interesante colocarse en su centro porque allí se puede escuchar un ritmo terrible y hermoso, como si fuera el corazón mismo de la naturaleza la fuerza que resuena allí. El rato de ensueño fue breve pero intenso, y tras contemplar la belleza del mar durante un rato, volví con Natalia y Gorin. Se juntaron a comer tambien Destornillador y Primito, y nos llevaron a El Globo, un local que mantenia el buen nivel del Centenario.
Por la tarde, empezamos a recoger a los nuevos llegados a Gijón, y visité la casa de Rodolfo Martinez (Rudy) y Marisa, un pequeño paraiso friki lleno de cómics, libros y DVD. De allí fuimos a pasear por la semana negra, donde cayeron las primeras bajas: algunos júcares policiales.
Por la noche, nos juntamos todos para ir a cenar, aproximadamente 50 personas, ya habiamos llegado casi todos. Comimos una parrillada demencial, llena de carnes deliciosas, y en la que el verde era apenas un elemento minimamente decorativo.ç
Sí, hasta ahora todo ha sido comer y comer, y luego pasear para seguir comiendo más... pero que quereis, los actos comienzan el sábado, hay que matar el tiempo con algo!!!!
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