martes, enero 31, 2006

Kancho!!!

El amigo Kaoss me ha pasado los datos del blog absolutamente impresionante: Outpost Nine.

El autor es un joven negro que trabaja de profesor de inglés en Japón. Apenas he leido un par de posts y son increibles. Es un autentico shock cultural para el pobre hombre, que se encuentra con que cada dos o tres dias alguien le pregunta si tiene la polla grande, tal y como se dice de los negros, o le pidan permiso para podersela palpar (o que no se lo pidan y se la palpen). Tambien nos habla de los superpoderes que ganan los occidentales al entrar en el país, los peligros del Octopus y la utilidad de llevar pantalones anchos y caidos si vas a Japón.

El motivo es un juego infantil, el Kancho, consistente en juntar las manos, dejar los indices extendidos e intentar meterselos por el culo a alguien si lo pillas por sorpresa. Al parecer se trata de una costumbre japonesa, tambien conocida en Corea, y que desde que este hombre habló de ella en su blog se ha extendido tambien por América. Aunque en estados unidos y Korea el Kancho se considera acoso sexual, en Japón se considera un juego de chiquillos y es normal que la gente sea kanchoada. En wikipeda comentan además que existe una similaridad fonética muy grande entre "Kanjo Kudasai" (traigame la cuenta) y "Kancho Kudasai" (Hazme Kancho), que puede provocar risas histéricas en los camareros cuando tratan con turistas.

Pero aqui no acaba la cosa. En Wikipedia tenemos un enlace a la entrada Boong-Ga Boon-Ga. Se trata de una maquina de videojuegos que tiene como objetivo insertar un dedo de plástico en el molde de unas nalgas y retorcerlo, estrujarlo, apretar, empujar, de la forma más agresiva posible, mientras en la pantalla vemos la cara de nuestra victima y escuchamos sus gritos de dolor (es posible escoger entre ex-novios/as, suegras....). Lograr una puntuación alta nos permitirá además volver a casa con una bonita caca de plastico como premio.

Japon cada dia me parece más y más un lugar del que quiero descubrir cosas, pero no llegar a visitar nunca.


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