lunes, noviembre 13, 2006

Y la hispacon ya terminó.

Un poco tarde, pero allá vamos.

La Hispacón se anunciaba como una hispacón de mínimos.
Organizada en mes y medio, de forma apresurada, no se esperaba demasiada asistencia ni una gran profundidad.

Vamos, que fuimos totalmente engañados y nos encontramos con algo que superaba todas nuestras expectativas. Montar una Hispacon cochambrosa teniendo un año de tiempo nunca más tendrá excusa, despues de lo que ha habido este año.

Debo confesar dos cosas (tres, si incluyo que la opción "deshacer" de blogger en firefox está más allá de mi comprensión): 1) Esta es la primera Hispacon a la que voy, hasta ahora sólo había ido a Asturcones. 2) Me he perdido el 50% de los actos por puro despiste. Si no era porque había ido a buscar la cámara al hotel, porque me había despistado hablando, habia leido la información del dia que no era, si no, vete a saber.

Me perdí toda la programación del viernes, y practicamente la cena, porque encontramos a la gente cenando en una terraza mientras buscabamos la biblioteca. Para entonces era un caos, no había forma de pedir nada y comimos poco y de forma descontrolada. Eso si, estaba bueno.

Del sabado ví la presentación de Richard Morgan, un autor muy entrañable e interesante, del que quiero leer y saber más. Me gusta como piensa. Despues tuvimos a mi idolatrado Ian Watson, con una conferencia sobre Inteligencia Artificial. Fue gracioso porque Watson la leyó en castellano y parecía el lector automático de Windows, pero más allá de la anecdota, me pareció muy interesante, sobretodo cuando pasó a hablar de teoría de memes, apenas doce horas despues de una larga conversación con medio simbionte sobre el mismo tema.

De la tarde vi unicamente la presentación del libro de Kiril Yeskov, que pinta muy interesante, pero que no es una novela. Me parece un tanto engañoso llamar novela a un libro que tiene 110 páginas de introducción-ensayo y 110 más de novela-exposición de la tesis. Eso si, leermelo, me lo leeré, porque pinta interesantísimo.

Del resto, poco más. Estuve demasiado ocupado saludando a gente, fraguando planes, y poniendome morado a base de cazón adobado, lomo en salsa, embutidos, fritos varios y tostadas con jamon serrano... me he engordado kilo y medio en cinco dias, porque despues de abandonar la hispacón me fui dos dias a Sevilla a casa de mi amigo Ldu92 y allí seguí cebandome a base de serranitos, gambas al ajillo, montaditos varios, vino de naranja y un bufet libre asiatico con Wok, al que acudí en dos ocasiones. Despues de varios meses sin probar el pan, hasta los bocatas de lomo (semi-transparente) con queso del tren me parecieron magnificos.

Lo peor de la hispacon: lo de todas estas convenciones. Te encuentras con mil y la madre, quieres saludar a todo el mundo, acabas hablando con los de siempre, y el mismo dia de irte descubres que el tipo aquel que había sentado a tu lado es alguien con quien querías hablar, pero no lo sabias. Por suerte habrá más eventos.

Aqui teneis las fotos.

Y de muestra, una imagen típica de la hispacón: un monton de peña alrededor de una mesa, esperando la comida y hablando de frikadas varias.

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