sábado, enero 29, 2005

Expulsados de Edén



Esta es la historia que explicaré cuando sea viejo, si tengo nietos, a mis nietos, sino los tuviese, a los nietos de mis amigos, y si no tuviese amigos, al primero que pasase por la calle.

En un principio todo era oscuridad. La gente vagaba sin reconocerse en las miradas de los demás. Cada uno hacia lo que buenamente podía, y recorría solitario su camino, al borde del abismo.

Hasta que un día, el Cyber exclamó: Que haya una Web que agrupe mis temas favoritos, mis inquietudes, para compartirlas con los demás. Así que cogió sus manuales de programación y mil cosas más, y tras un arduo trabajo de horas, días y semanas hizo la Web. Y el edén fue Naranja y gris. Y vio que estaba bien.

Y el Cyber dijo: haya unos foros en los que todo el mundo pueda manifestar su opinión, y una biblioteca que recoja lo mejor de éste nuestro mundo y las opiniones de los que nos visiten. Y así lo hizo, y vio que estaba bien.

Y el Cyber separó el terror de la fantasía, y la ciencia ficción de ambos, pero también dejó un lugar para el ensayo y los bolsilibros, que muchos añoraban. Y empezaron a venir más usuarios. Y vio el Cyber que estaba bien.

Y dijo el Cyber: podéis colaborar en la Web y aportar lo que os sea grato darme, por vuestra propia voluntad, e invitar a vuestros amigos a visitarme. Y la biblioteca creció, los foros prosperaron y los usuarios aumentaron. Y vio el Cyber que estaba bien.

Y dijo el Cyber: en el espacio de portada habrá artículos y reseñas, y las editoriales nos darán libros y nos permitirán contactar con autores para entrevistarlos. Y nacieron los colaboradores para ayudarles en esa tarea.

Y dijo el Cyber: aquí hay mucha gente y quiero que todo el mundo esté a gusto. Quiero que la gente se comporte con respeto hacia los demás, y que los temas duplicados o redundantes sean purgados, que las opiniones de libros estén razonadas y tengan fundamento. Y nacieron los administradores para ayudarle con esa tarea.

Y dijo el Cyber: cada día me llegan más y más fichas de libros. Es importante que la biblioteca esté al día y refleje tanto nuestra historia como el avance que va tomando el género con el tiempo. Y nacieron los bibliotecarios para ayudarle con esa tarea.

Y dijo el Cyber: No es bueno que la literatura esté sola. Y linkó la Web con Pasadizo, El Rincón de Nacho y El Sitio de Ciencia Ficción, y la comunidad creció aun más.

Y dijo el Cyber: Que vuestras ideas sean fecundas y se esparzan por los foros. Y así se hizo, y diez mil usuarios se volcaron en ese lugar virtual que era ya parte de su vida. Y la Web ganó un premio Ignotus, por lo que era, la mayor comunidad virtual de literatura fantástica que jamás hubo, y en ella el cordero y el león debatían sobre los temas más variados, con respeto y amistad.

Y los usuarios un día dejaron de ser sólo virtuales y empezaron a conocerse personalmente, y hacer kedadas, y se forjaron vínculos de amistad auténtica entre iguales que de otra forma nunca hubieran podido encontrarse. Y sí, también hubo amor entre algunos de ellos.

Y llegó el séptimo día, y el Cyber decidió descansar, pero hubo problemas con el servidor, y no pudo.

Pero durante todo este tiempo, entre todos los usuarios había los que estaban descontentos. Que estaban celosos del trabajo del Cyber, de los administradores y bibliotecarios, y querían hacer de la Web su Web. Usuarios que no creían que Tolkien fuera dios y Asimov el maestro, que decían que Heinlein era un Facha, y que discutían por el puro placer de discutir, y de malas formas, y llamaban nazis y dictadores a los administradores y al propio Cyber, porque confundían libertad con libertinaje y querían tener la libertad de herirse y matarse entre ellos con palabras. Entonces intervenían los administradores, a hierro y fuego, y los infractores eran expulsados del Edén, sin apenas haberse dado cuenta de dónde estaban, sin ser conscientes de lo que habían perdido, de lo que ni siquiera habían llegado a conocer.

Y de entre ellos hubo uno que estuvo incluso entre las filas de los bibliotecarios, con lo que su caída fue mayor aun, y su nombre aun se recuerda, y su rencor hacia la Web todavía puede palparse allí donde está. Su rencor y su amor, pues el recuerdo de lo perdido lo atormenta. Y también hay quien le añora, pues muchas de sus ideas eran buenas, y sólo le cegó la soberbia. Su nombre era Ivanbaley.

Pero todo lo que empieza tiene un fin, y todo lo comienza tiene un día que terminar.

El Edén tenía ya cinco años, y el Cyber aun no había podido descansar, siempre había algún problema que solucionar. Problemas técnicos, el servidor, facturas, los foros, los cambios, problemas domésticos, internos, problemas, problemas, problemas. Y alargó la amarga decisión todo lo que pudo, pues la Web le era querida como si fuera sangre de su sangre, lo sé, y lo sabemos todos, y quería evitar por todos los medios el dolor de la gente que sentía lo mismo que él por su creación. Pero todo tiene un límite.

Y dijo el Cyber:

Hola a todos.

Chic@s, cyberdark.net cierra sus puertas. Después de cinco años de arduo trabajo me veo imposibilitado, tanto por mi trabajo actual como por mi estado anímico, a soportar esta "pesada carga", un hijo que requiere demasiada atención por mi parte y que, de ser un hobby, se ha convertido en una obligación.

Por ello, el 1 de marzo chapamos.

Lo único que quedará de la web será el dominio, las cuentas de correo existentes actualmente (algunas las tenéis vosotros) y alguna que otra cosa:

1- Los artículos publicados hasta ahora, en plan sencillo, a modo de listado.
2- La tienda, en espera de que sin el apoyo de cyberdark vaya bien.
3- En la nueva portada de cierre habrá más cosas, en espera que las organice, como links a sitios web donde os vayáis juntando de nuevo.
4- Otras ideas.

La biblioteca, que es una de las partes que más me ha gustado siempre, creo que tendríamos que "liberarla", es decir, poner en un fichero (Access, por ejemplo) todo su contenido y en otro las imágenes de todas y cada una de las portadas para que todo hijo de vecino que quiera pueda descargarlas y usarlas como más le guste, ya sea incorporándolas a su web o como base de datos personal de documentación. Estoy seguro que de esta manera nuestro trabajo no habrá sido en vano. Esta decisión está pendiente de la opinión de los bibliotecarios y de un par de "ideas" que me han hecho llegar.

Animo a todos los "grupos" de usuarios que vayan montando lista de correo o webs y que me digan donde están, para poder enlazarlos una vez cerrada la web.

Un saludo y muchas gracias a todos por estos cinco años de apoyo y trabajo.


Y hubo lamento en toda la tierra, pues había cyberdarkianos de corazón repartidos por todo el globo. Y hubo lágrimas, e imprecaciones, y hubo súplicas, y hubo exigencias. Pero el Cyber no respondió. Nos había dejado solos, porque su trabajo ya había terminado. Por que ya nos habíamos conocido y ya no estábamos solos, y no volveríamos a sentirnos únicos y diferentes por nuestros gustos disímiles, porque sabríamos que en otros lugares hay más gente como nosotros y seguiríamos en contacto.

Esta es la historia de cómo fuimos expulsados del Edén, y cómo tuvimos que seguir nuestro camino, recordando siempre el fuego de lo que un día conocimos, allí, quemando nuestro corazón con el dolor de lo perdido y el agradecimiento por lo que un día compartimos.

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