El salón me ha gustado bastante este año. Otras veces los stands de editoriales solian estar justo en la entrada, con lo que eran la primera opción para los recien llegados, y acaparaban la mayor parte de las compras. Este año estaban en el espacio central, ocupando los espacios más grandes, con lo que había un cierto margen de maniobra.
Resulta curioso cómo, a pesar de saber que estás en un recinto lleno de librerias con cientos de ejemplares de cada cómic, resulta tan dificultoso comprar "ese" comic más tarde. Caminar por el saló se convierte en una lucha continua entre el yo que quiere ese comic y lo quiere ya, y el yo que sabe que a las seis de la tarde ese puto comic va a seguir en la tienda y no quiere acarrearlo todo el puto dia.
De todas formas, en el salón se pueden encontrar ofertas varias, saldos, fanzinerosos que practicamente te meten su fanzine en la mochila mientras te registran los bolsillos en busca de calderilla, y etceteras varios, que hacen que a pesar de todas las precauciones tu mochila pese como un muerto, y tu huelas igual, gracias a la combinación de exterior frio, interior sofocante, mochila cargada y chaqueta.
Este año ha sido un año de colas. He visto más colas que nunca, y no hablo sólo de las chicas disfrazadas de catwoman y las de los stands con autor. Tambien había un par de espacios destinados a la Wii. Jugué tres partidas, dos al tenis y una al Dragon Ball. Realmente es un cacharrito muy interesante y adictivo. Resulta realmente mágico ver como se relacionan los movimientos del mando con los de los personajillos en la pantalla. Creo que acabará cayendo, a pesar de las quejas que estoy viendo por internet sobre el tema PAL / NTSC (letritas más o menos), porque es un viiiiiiiciiiiiioooooooo!
Otra cosa genial del salón es que es un punto de reunión del frikerío, hubo momentos en que se me acumulaba la gente con la que me encontraba, aunque eso tuvo sus problemas. Hubo gente con la que apenas hablé más allá de un hola que tal.
Para ser el salón de cómic, no he comprado demasiadas cosas. Quizás porque algunas ya tenía pensadas conseguirlas pasada la vorágine salonera.
- Barri llunyà, de Jiro Taniguchi. Edición integral en color, y en catalán, de la que considero la mejor obra de Taniguchi. Muy bien editada, cosida y pegada y con algunas páginas en color. Sobre el contenido, ya hablaré cuando haga la relectura, sólo adelanto que es maravilloso.
- JLA Clasificado: Mapas del infierno. Me esperaba más de Warren Ellis. Se trata de una aventurilla de la JLA. Interesante, bien pensada, pero sin ningún mérito que la destaque por encima del cómic superheroico normal.
- Muerte, el alto coste de la vida, de Gaiman y Bachalo. Otro cómic que merece post aparte.
- Hellblazer: Llamas de condena, Miedo y Odio, y Un cínico a las puertas del infierno. Ya sólo me falta el segundo volumen de la etapa norma para tener todo lo publicado de Hellblazer. Una gran saga que, pese a sus altibajos, merece la pena leer. Otro post que queda pendiente.
- Legión de Superheroes (4 de 4), de Mark Waid. Desenlace de una magnifica saga que retoma los viejos personajes de la Legión dándoles un interesante giro.
- La parejita, de Manel Fontdevila. Los cinco Pendones del humor que han salido hasta el momento dedicados a La parejita. Monteys y Fontdevila son lo más mejor del jueves.
- Principe valiente 1. Un cásico del cómic. Me lo han regalado con la entrada. No me llamaba mucho, porque creía que era cursilón y arcaico. Ya sabeis, esos prejuicios que a veces nos toman por sorpresa y nos impiden disfrutar de cosas que, sin saber nada de ellas, nos negamos a conocer.
- Mata a tu novio, de Grant Morrison. Grant Morrison. No hay nada más que decir. Nihilismo adolescente, violencia sin sentido y sexo.
- 7 soldados de victoria: Bulleteer. Grant Morrison....
- Doom Patrol 18. Más Grant Morrison. ¿FAn yo? Nooooooo! que va!
- BDBanda 1: A ver que tal. De momento ha caido practicamente por la história de Rubin, que aún no he leido y la descacharrante Calavera Lunar.
- Lovecraft, de Hans Rodionoff y Enrique Breccia. Un bonito homenaje a Lovecraft, el guión no me acaba de llegar, pero el dibujo de Breccia hijo es muy lovecraftiano.
- Top 10, de Alan Moore. Un magnifico volumen que recoge las aventuras de unos policias superheroicos en una ciudad en la que todo el mundo tiene superpoderes. Mi favorito, el taxista ciego con poderes zen, que te lleva a dónde debes ir, no a dónde quieres ir.
- El circo del desaliento, de David Rubin. Lo compré sólo para que lo firmara, porque ya tenía otro ejemplar. Uno de los cómics que hacen grande el género.
- ABSOLUTE WATCHMEN: Planeta sigue con sus ediciones mástodónticas. La obra es una pasada, el continente deja mucho que desear.
Os cuelgo, para terminar, el dibujo que me hizo David Rubin. Se podría considerar que es una especie de Sant Jordi.
Sonando: "Frequenze e dissolvenze", de Franco Battiato.
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